17 de agosto de 2016

El nombre del viento - Rothfuss

reseña el nombre del viento
Hay libros que cuando empiezas a leerlos piensas "aquí hay historia" y sin duda El nombre del viento de Patrick Rothfuss es uno de ellos.

Volvía a ser de noche. En la posada Roca de Guía reinaba el silencio, un silencio triple.
Empezamos la historia en una posada en la que ocurren ciertos sucesos extraños que generan esa maravillosa sensación de "voy a leer un poquito más antes de dejarlo". En la posada conocemos a Kote el posadero, una persona normal y afable que trata de sobrevivir a los problemas económicos que general la violencia en los caminos.

Kote todavía es nuevo en la localidad, y por eso mantiene un perfil bajo en las conversaciones. Sin embargo, pronto recibe la visita de Cronista, un escribano que se dedica a poner por escrito las historias que merecen ser contadas. Cronista saber que Kote, no es realmente Kote, sino Kvothe, un hombre mítico del que la mayoría de los parroquianos de la posada cuentan historias fantásticas para entretenerse. Ese tipo de hombre, del que te gusta hablar, admiras, pero realmente no quieres conocer por tratarse de un ser peligroso. Y así comienza nuestra historia, con la narración de Kote a Cronista de su niñez, mientras la posada está vacía y con ciertas interrupciones que no hacen sino añadir un halo de misterio a lo que pasará después. Y es que El nombre del viento es una primera parte y como tal nos muestra el pasado, pero ya nos va dando unas pinceladas del presente, que quizá se cuenten en otros volúmenes o quizá queden a la imaginación del lector. Desde luego es algo que no se puede saber solo a partir de este primer volumen.

La novela está contada en primera persona, como si un personaje le contase al otro su vida y tiene cierto componente de picaresca, pero nada que ver con un estilo Lazarillo de Tormes. Kvothe es un niño muy inteligente que se sirve de su gran capacidad de aprendizaje para sobrevivir. Iremos descubriendo como comenzó a forjarse el mito, primero con sus padres, luego en una gran ciudad y por último en la universidad, donde el joven tratará de aprender como usar la simpatía (magia) y sobre todo, cuál es la verdadera historia de los Chandrian, una especie de demonios que aterrorizan a las personas, pero sobre los que casi nadie sabe nada. Sin duda nos quedaremos con ganas de más.

Se trata por tanto de una novela de literatura fantástica donde encontraremos lo mejor del género, magia y animales fantásticos en su dosis justa y sin que la fantasía afecte al argumento. Sin duda un buen libro que recomiendo a todos los amantes del género.

Puedes encontrar El nombre del viento aquí.

Lee la reseña de la segunda parte de esta trilogía, El temor de un hombre sabio aquí.

2 comentarios:

  1. Este es un libro del que no sabía qué pensar. Hay quien me lo ha puesto por las nubes y quien me ha dicho que se hace eterno. Pero después de leer tu reseña creo que le voy a dar una oportunidad y así juzgo por mi misma.
    Gracias por la reseña!
    Por cierto, te he nominado en mi blog al liebster award por si te interesa hacerlo.
    Un saludo! ;)

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  2. Hola Ana María.

    Entiendo que haya gente a la que se le pueda hacer largo, porque es un libro típico de fantasía en el que la historia va poco a poco. Perosnalmente me ha gustado mucho y no se me ha hecho nada largo. Si lo lees ya me dirás que te parece.
    Saludos!

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